Si eres un amante del café, es posible que tengas una crema preferida que añade sabor y cremosidad a tu taza diaria. El café y la crema van de la mano. Sin embargo, es posible que te encuentres en una situación en la que necesites sustituir tu crema habitual por otra cosa y te preguntes qué poner en el café en lugar de la crema.
Sea cual sea el motivo, en este blog te mostramos alternativas a la crema para añadir a tu café.
¿Qué es exactamente la crema de café?
La crema de café es un líquido blanco o amarillo que se añade al café para mejorar su sabor. Es un edulcorante que se utiliza en el café y en algunas bebidas de té. Se mezcla con el café para reducir su amargor, acidez y hacerlo más suave.
La crema de café se presenta en diversas formas, pero el método y los ingredientes son casi siempre los mismos. Casi siempre se encuentra en una botella, lista para ser añadida al café una vez preparado.
Sin embargo, aunque las cremas para el café son deliciosas, algunas de las cremas más populares tienen un alto contenido de azúcares añadidos y contienen ingredientes como jarabe de maíz de alta fructosa, aceites y carragenina, así como sabores, edulcorantes y colores artificiales, que muchas personas prefieren evitar.
El consumo elevado de azúcares añadidos está relacionado con un mayor riesgo de aumento de peso, síndrome metabólico, síntomas depresivos y otros efectos negativos, por lo que es mejor limitar el consumo de azúcares añadidos en la medida de lo posible, incluso en la crema para el café.
Alternativas a la crema que puedes añadir a tu café
Tanto si sigues una dieta, como si necesitas una opción sin lactosa, o simplemente te has quedado sin crema, hay múltiples opciones disponibles para añadir sabor a tu café manteniendo la consistencia y el sabor que te gustan y te las presentamos a continuación.
Especias
Las especias son alternativas más saludables para el café. Puedes añadir canela o cúrcuma a tu café, esto le dará un toque muy aromático.
Las especias de China están disponibles en el mercado, es un polvo de cinco especias, y también puedes añadirlo a tu café para variar. También vale la pena probar el cardamomo, las semillas de hinojo y la menta para aromatizar el café sin usar conservantes ni consumir calorías.
Mantequilla
El café con mantequilla se convirtió recientemente en una tendencia que todo el mundo estaba deseando probar.
También conocido como café keto, a prueba de balas o Bulletproof, el café de mantequilla es simplemente su taza de café ordinaria con mantequilla utilizada como reemplazo de su crema habitual.
Dado que la mantequilla está hecha de leche y tiene un alto contenido de grasa, hace una taza de café perfectamente sedosa.
Lo mejor es la mantequilla “de verdad”, pero las cremas para untar a base de aceite vegetal también pueden ayudar en caso de apuro, cuanto más espesa, mejor.
También se utiliza aceite de coco para añadir gran cantidad de triglicéridos de cadena media que aumentan la energía sin que el cuerpo tenga la sensación de querer colapsar más tarde por el efecto de la cafeína.
Proteína en polvo
La mayoría de las proteínas en polvo tienen un sabor delicioso, lo que las convierte en un excelente sustituto. Sin embargo, comprueba en la etiqueta nutricional si hay azúcares añadidos y productos lácteos, por si tienes restricciones dietéticas.
Manteca de cacao
Si la mantequilla en tu café no se ajusta a tu apetito, entonces trata de usar una cucharadita de mantequilla de cacao en tu café para darle un sabor a chocolate suave.
Además, proporciona las mismas cantidades de antioxidantes que la mantequilla y el aceite de coco, pero sin productos lácteos.
Yema de huevo
La yema de huevo batida en el café se originó en Corea en la década de 1940 debido a la escasez de leche. La gente empezó a sustituir la leche del café por yema de huevo, creando un café espumoso cuya popularidad pronto se extendió por todo el mundo.
Si el consumo de huevos crudos te asusta, asegúrate de comprar huevos pasteurizados.
Es muy fácil de preparar:
Mucha gente añade crema al café para quitarle el sabor amargo; la yema de huevo tiene la tendencia natural de rebajar el sabor amargo del café, dándole un café rico en sabor y textura.
Helado
Los helados a base de vainilla probablemente sean los más adecuados en este caso, sin embargo, los sabores de chocolate, pistacho y los tipos de ron con mantequilla también funcionan.
Vinagre de manzana
El vinagre de manzana puede sorprenderte como una buena alternativa en tu café a la crema, pero añadir una cucharada caliente a tu taza le dará un toque de sabor a pastel de manzana.
Miel
Típicamente colocada en el té caliente, la miel funciona muy bien en el café también. Elimina la necesidad de añadir azúcar y el sabor amargo que puede acompañar al café negro.
Su sabor es más dulce que el del azúcar normal, por lo que no necesitarás tanta cantidad como con el azúcar de mesa. Esto significa que puedes disfrutar de la dulzura extra en el café sin experimentar el desagradable pico de azúcar en la sangre después.
Conclusión
Así pues, tanto si te has quedado sin crema, como si sólo quieres probar algo nuevo para mejorar tu salud, hay muchas formas de sustituir la crema sin sacrificar el sabor.
