El capuchino es una preparación que enamora a cualquiera. Pero muchos creen que es un café que solo pueden disfrutar en una cafetería o en algún establecimiento. ¡La verdad es que no! Hoy aprenderás cómo hacer un capuchino perfectamente espumoso y con el sabor que te encanta. ¡Claro! Necesitarás de una máquina de expreso, una cafetera de hidropresión o al menos un vaporizador. Pero no te preocupes, déjanos ayudarte…
¡Vamos a preparar el mejor capuchino en casa que hayas probado!
¿Qué es un capuchino?
Un capuchino es una preparación a base de café espresso, leche vaporizada y espuma. Su historia se remonta a mediados del siglo 20 en Italia. Por eso el capuchino es especialmente famoso en este lugar.
Para que sea el capuchino perfecto, cada ingrediente debe estar en partes iguales. Recuerda que el café espresso es la base de la mayoría de todas las preparaciones con café. Por eso, tener un café espresso de buena calidad también hará que tu capuchino sea perfecto.
Ingredientes
- Una taza de café espresso.
- 120 mililitros de leche.
- Jarra de leche para hacer espuma.
- Taza especial para capuchino.
- Máquina de expreso o cafetera de hidropresión y vaporizador.
Cómo preparar el capuchino perfecto – Paso a paso
- Preparar el café espresso:
Como lo dijimos antes, este es uno de los pasos más importantes porque es la base de nuestra preparación. Grosso modo, preparar un espresso es muy sencillo. Necesitas una máquina de expreso para tener el sabor y el cuerpo auténtico. Pero también puedes utilizar otros métodos de preparación más caseros para acercarte lo más posible a un espresso.
Si quieres saber cómo hacer un espresso en diferentes instrumentos de preparación, visita nuestro post sobre ¿cómo preparar un buen café?
- Vaporizar la leche:
Para esto necesitarás de una máquina de expreso, una cafetera de hidropresión o un vaporizador.
Si tienes alguna de estas cafeteras, debes presionar el botón de vapor o poner esta función en tu cafetera. Como recomendación, puedes ir abriendo la varilla de vapor para que salga la humedad. Dos segundos bastarán para que salgan algunos residuos de agua.
Añade los 120 ml de leche a la jarra de metal y pon la jarra justo en la boquilla del vaporizador. El secreto en este punto para tener la espuma perfecta es que la leche debe estar entre 55 °C y 65 °C al finalizar el proceso de vaporización.
Para saber que la boquilla está en la posición correcta, debes escuchar un sonido contante y muy parecido al que sale de los dispensadores de crema chantilly. Recuerda que la boquilla debe estar dentro de la jarra, justo debajo de la superficie de la leche.
Una vez alcances la temperatura correcta, ¡no dejes que se pierda la espuma! Da unos ligeros golpes a la jarra contra una mesa para quitar las burbujas más grandes y continúa dándole giros suaves a la jarra para no perder la espuma.
- ¡Mezclar!
Ahora que tienes el espresso y la leche lista, es hora de hacer la magia. Vierte tu espresso en la taza en donde servirás tu capuchino. Luego, añade la leche en tu taza comenzando desde el centro. Si quieres puedes jugar un poco a hacer algo de arte latte. Recuerda que las proporciones del capuchino son: 1/3 de espresso, 1/3 de leche vaporizada y 1/3 de espuma.
Toppings: Es el momento para que agregues algún tipo de endulzante si lo prefieres. También puedes adicionar salsa de chocolate por encima para hacer figuras y endulzar.Puedes añadir los sabores que prefieras: chocolate, caramelo, vainilla, canela, entre otros.
Tips para tener el mejor capuchino
- Utiliza leche entera y fría. ¿Por qué? Porque la leche entera es la que más grasa tiene, esto ayudará a tener la mejor espuma. Y fría porque tendrás más tiempo para calentarla y vaporizarla mientras creas más espuma.
- Si decides escoger una leche vegetal, asegúrate de que esté bien fría para dejarla más tiempo en el vaporizador y obtener la mayor crema y espuma posible. Recuerda que con una leche vegetal o semidescremada no obtendrás la misma espuma y cremosidad que con una lecha entera de vaca.
- Inclina la jarra. Para obtener los mejores resultados en la espuma, debes inclinar ligeramente la jarra metálica en comparación a la boquilla de vapor. Si notas que hay burbujas muy grandes, para. Gira suavemente la jarra para eliminar esas burbujas grandes y continúa con el proceso.
- Mezcla con ligeros movimientos la leche y la espuma. Una vez está vaporizada, lo mejor es girar la jarra por algunos segundos para que se integre la leche y toda la espuma. El consejo para saber que la leche ya está bien espumosa es que debe tener burbujas muy pequeñas.
¡Es hora de hacer el mejor capuchino! No te pierdas de disfrutar un capuchino de excelente calidad en casa. Asegúrate de hacer un buen espresso, obtener una buena espuma y ¡listo! Aprovecha para divertirte haciendo figuras en tu capuchino. Prueba con diferentes toppings y disfruta cada vez de una preparación diferente.
