Historia del Espresso italiano

¿Sabías que el espresso existe desde hace más de 100 años?

Descubre en el siguiente blog mucha más información relacionada con la historia de esta bebida representativa de los italianos.  

Origen del Espresso italiano

Para remontarnos a los orígenes del espresso italiano tenemos que hablar de los siguientes momentos clave: 

Siglo XIX: El negocio del café era muy bueno en Europa, de hecho, había cientos de cafeterías en todo el continente. Sin embargo, la preparación del café era un proceso muy lento, por lo cual los clientes debían esperar mucho tiempo. 

Bajo ese panorama, los inventores de toda Europa comenzaron a explorar nuevas alternativas para utilizar máquinas de vapor y así o con ello reducir el tiempo de preparación. 

1884: El inventor Angelo Moriondo de Turín, Italia presenta una patente de la primera máquina que permitía elaborar grandes grandes cantidades de café usando vapor y agua. Esto sucedería en la exposición general de Turin de 1884 donde recibiría la medalla de bronce.

Moriondo fue considerado el pionero de las máquinas de espresso, al construir una máquina innovadora con el suficiente potencial para cambiar la forma de trabajar de los baristas.

La máquina constaba de una caldera para forzar el agua a través de un disco de café a alrededor de 1.5 bares de presión, mientras que una segunda caldera encajaría el disco y terminaría la extracción.

La idea que tenía Moriondo era ofrecer una mayor cantidad de cafés, pero en menos tiempo y así poder ofrecerles un mejor servicio a los clientes.

Moriondo, sin embargo, se limitó a la construcción tradicional de unos pocos prototipos para su actividad empresarial. Nunca quiso producir su invento a escala industrial.

Muchos decían que a moriondo le faltaba una mentalidad emprendedora y una visión industrial.

Mientras que otros lo defendían diciendo que él solo quería agilizar la preparación del café y no esperaba crear una bebida en particular.

1901: Luigi Bezzera se inspiró en la máquina espresso de Moriondo y patentó su propio diseño que consistía en un gran cilindro vertical con una caldera de latón en su interior, calentada por una encimera de gas. Además, incluyó dosificadores al lado de la caldera para colocar el café. 

Para hacer el café había que abrir un grifo: el agua hirviendo y el vapor pasaban por el café y la extracción tardaba 1 minuto aproximadamente.

Aunque la máquina de Bezzera era mejor que la de Moriondo, tenía problemas para controlar la presión y la temperatura lo que dificulto la producción de un tiro constante. Recuerda que, la consistencia es un punto clave en el mundo del espresso.

Bezzera construyó algunos prototipos de su máquina, pero no tenía el suficiente dinero e ingenio para expandir su negocio comercializando la máquina. No obstante, conocía a alguien que sí podría hacerlo.

Esta persona fue Desiderio Pavoni, fundador de la empresa milanesa, La Pavoni.

1902: Pavoni compra la patente de Bezzera y comienza a producir las máquinas para comercializarlas en masa.

Hay que señalar que estas máquinas las fabricaba en un pequeño taller en via Parini, Milán.

1905: Pavoni comienza a fabricar su propio diseño de máquinas basadas en la patente de Bezzera. Es por esto que comienza a fabricar la primera máquina de café espresso con portafolio de producción masiva, nombrada como la Ideale.

Esta máquina tenía realmente poca relación con las máquinas modernas, puesto que sus cabezas de grupo alcanzaban temperaturas de hasta 140°C a una barra de presión más baja que las máquinas actuales. En consecuencia, la Ideale extrajo una bebida más parecida al café filtrado que a un espresso.

1906: La creación de Bezerra se presentó como la primera máquina de espresso en la Feria Mundial de Milán de 1906.

La máquina contaba con una caldera vertical que podía elaborar una taza de café en segundos. Además, contaba con algunas mejoras respecto a la patente de Moriondo, las cuales hacían referencia a la válvula de seguridad y la lanceta de vapor para leche.

Se dice que la máquina de Bezzera podía llegar a producir 1000 tazas de café por hora.

1920: Después de la primera guerra mundial el café se extendió por toda Italia. Un ejemplo de ello, fue que el consumo per cápita de café en Italia alcanzó 1.2 kg/año.

Fue entonces cuando apareció en escena Pier Teresio Arduino, un fuerte competidor de Pavoni.

Arduino era un inventor que soñaba con fabricar una máquina que no dependiera del vapor para crear la presión necesaria para la elaboración del café. Sin embargo, no fue capaz de lograrlo.

Aun así, Arduino no se dio por vencido y utilizó sus conocimientos en marketing, para crear una campaña que hizo que el espresso se pusiera de moda. 

Para llevar a cabo esta estrategia se contactó con el ilustrador Leonetto Cappiello, quien diseñó un estilo artístico futurista, para hacer una imagen visual que combinaba la idea de que tanto la cafetera como la locomotora eran movidos mediante el vapor. 

En otras palabras, el póster capturaba la esencia del espresso y la velocidad moderna.

Por otra parte, también debes saber que Arduino fue de los primeros en exportar máquinas desde Italia a otros países del mundo.

Este inventor tenía un taller mayor que el de Pavoni en Italia y, por ende, estaba mejor preparado para exportar máquinas fuera de Milán y así expandir el espresso al resto de Europa. 

Así lo hizo, de hecho, llegó a abrir una tienda en París para venderles máquinas a los cafés parisinos.

1927: Se instala la primera máquina de espresso en los Estados Unidos.  Esta máquina era de la marca La Pavoni, y fue instalada en la ciudad de Nueva York.

Por otra parte, Giuseppe Bambi creó su propia máquina de café espresso, nombrada la Fiorenza, sin embargo, ésta no pudo venderse. 

Fue entonces cuando se unió con su hermano Bruno para fundar L’Occitanel Fratelli Bambi. Juntos crearon su primera máquina de espresso, a la que nombraron “La Marzocco”, debido a la famosa escultura de Donatello de un león sentado con un símbolo de Florencia en el escudo.

1930: El consumo de café cayó hasta 0.8 kg per cápita. Los problemas de importación y escasez redujeron el consumo de café italiano.

1935: Las cafeterías comenzaron a atraer a los trabajadores gracias a la fuerza que tenía la bebida. Debes tener en cuenta que en el siglo XIX eran lugares mucho más tranquilos.

1938: Surge la palabra barista.

El éxito del Fascismo impulsó una campaña para italianizar las palabras, por ende, la palabra “Barman”, fue reemplazada por la de “Barista”, creando así un vínculo mucho más grande entre el espresso y la identidad italiana.

Además, en ese mismo año, el cantinero milanés Achille Gaggia crea la primera cafetera espresso a presión.

Fue una construcción innovadora ya que utilizó un mecanismo de pistón que, forzando agua a alta presión a través del café molido, permitía preparar un espresso ideal con crema en tan solo 15 segundos.

Las primeras reacciones a la crema no fueron positivas, debido a que las personas no estaban acostumbradas a verla en su taza. Sin embargo, con el tiempo las personas empezaron a percibirlo como algo positivo al ser un sello distintivo de la bebida.

1939: Los hermanos Bambi seguían trabajando para crear una máquina que hiciera mejor café y también que fuera más fácil de usar para el barista.

Lo lograrían girando la caldera vertical de lado, creando la máquina de espresso horizontal, la Marus. 

Lamentablemente la patente expiró durante la agitación burocrática italiana posterior a la segunda guerra mundial. 

Ningún ejemplar de esta máquina sobrevivió puesto que los materiales se utilizaron para fabricar las armas en los años del conflicto. De hecho, fueron pocas máquinas las que lograron sobrevivir a este periodo.

1947: Achille Gaggia inventó la máquina de bombeo manual, esta ejercía más presión sobre el disco, extraía más coloides y aceites y también producía crema, una parte indispensable del espresso moderno.

Las características de la bebida extraída cambiaron gracias a 2 importantes innovaciones técnicas:

  • La reducción de la temperatura del agua de 100°C a 80°C
  • El aumento de la presión que llegaba a unos 8-9 bares.

Ahora bien, Gaggia logró crear esta máquina gracias al trabajo previo realizado por Marco Cremonese, quien había estado trabajando para agregar presión al proceso de elaboración del café antes de la segunda guerra mundial.

Cremonese desarrolló un pistón de resorte, pero nunca pudo construir una máquina de espresso que utilizara esa tecnología.

Gaggia por el contrario si lo haría.

Debes tener en cuenta que el pistón de resorte es muy importante porque crea una espuma en la parte superior del espresso, conocido también como la crema. 

1948: Ernesto Valente, director de Faema compró el invento de Gaggia.

Gaggy y Valente no querían que estas máquinas de alta presión estuvieran en el mercado.

Gaggia consideraba que esta máquina era un artículo de lujo destinado solamente a los establecimientos de primera clase.

Mientras que Valente decidió trabajar con el objetivo de producir máquinas más baratas. como posteriormente veríamos en la década de los 60s.

1961: Ernesto Valente, de la compañía de ingeniería eléctrica Faema, lanzó a nivel mundial el famoso F E61.

Recuerda que el E61 es el padre del espresso moderno, pues fue la primera máquina semiautomática que permitía a los usuarios administrar parámetros de extracción. 

Esta máquina tenía una caldera horizontal en lugar de vertical, no necesitaba de la fuerza manual del barista porque utilizaba una bomba motorizada que proporcionaba los 9 bares de presión necesarios para la elaboración del espresso.

La innovación más importante de igual forma sería un paso particular en la extracción del café, llamado la pre infusión, en esta fase el agua caliente permanecía en contacto con el café durante unos segundos antes de que la bomba aplicará presión al café.

Estos detalles claramente permitieron aumentar la consistencia y facilitó la tarea de los baristas.

1970: La caldera doble fue introducida por La Marzocco y permitió la producción de cientos de cafés en un día, manteniendo de igual forma la calidad de las bebidas.

Esta máquina tenía dos calderas independientes, una para vapor y otra para preparar café.

La Marzocco GS que fue el nombre que recibió la máquina, sería la base sobre la que construirían las futuras máquinas de espresso de la Marzocco.

1978: Kent Blakke, un emprendedor americano, viajó a Italia en compañía de un grupo de amigos para descubrir los orígenes de una máquina de espresso que se habían encontrado en una tienda de Sándwiches en Seattle.

A su llegada al país europeo se encuentra con Giuseppe Bambi y su hijo Piero.

Luego de hablar por unos minutos llegaron a un acuerdo para que Blakke empezará a importar máquinas de La Marzocco a los Estados Unidos.

1983: Howard Shultz, realiza un viaje a Italia trabajando para Starbucks (por aquel entonces solo era una empresa tostadora) como director de marketing y operaciones. Allí conoce la cultura del café de Italia y queda totalmente inspirado, por lo cual intenta convencer a Starbucks para que desarrolle cafeterías. Sin embargo, los dueños solo querían tostar frijoles. 

Schultz decide abandonar Starbucks para comenzar su sueño de llevar la cultura del café italiano a los Estados Unidos.

Para lograr este objetivo crea su empresa llamada II Giornale, la cual utiliza máquinas de espresso La Marzocco GS.

1987: Los dueños de Starbucks deciden vender su negocio de tostado para centrarse en una nueva empresa que han adquirido.

Schultz les compra Starbucks, por ende, deja atrás el nombre de II Giornale y comienza a centrarse en la expansión minorista.

1990: Starbucks crece gracias a la popularidad del espresso en Estados Unidos.

La Marzocoo presenta su nuevo modelo, nombrado como: la Línea, la cual era una actualización del diseño GS.

La Línea tenía una caldera de vapor que podía funcionar sin problemas ante las demandas de vapor de las bebidas estadounidenses con alto contenido en leche.

Además, los socios comerciales de Starbucks certifican la seguridad y el saneamiento de la máquina, lo cual le da una gran ventaja sobre las otras máquinas italianas.

1998: Starbucks decide pasar de La Marzocco Línea a las máquinas de espresso semiautomáticas. No obstante, La Marzocco Línea se logra convertir en una señal del movimiento del café de la Tercera Ola.

2000: La Marzocco participa como primer patrocinador de máquinas de espresso de Campeonato Mundial de Baristas.

Este patrocinio permitió que La Marzocco desarrollará relaciones clave con los baristas, quienes le brindaron información valiosa para seguir desarrollándose.

2005: Se lanza al mercado La Marzocco GB5, que es una máquina que incluye un sistema de estabilidad térmica, un sistema de precalentamiento que calienta el agua fría antes de que ingrese a la caldera y un sistema PID para mantener la temperatura del agua dentro de 0,5 grados.

2008: Los dueños de La Marzocco crean la GS3, una máquina similar a la GB5 pero con un tamaño más pequeño y 100 voltios, lo cual la hacía ideal para utilizar en casa.

Aspectos a tener en cuenta del Espresso Italiano

  • De acuerdo con la Asociación Americana de Cafés especiales, el espresso es un café de entre 25 y 35 ml aproximadamente preparado con 7 y 9 gramos de café molido fino, por el que se hace circular agua entre 90 y 96 grados centígrados a 9 o 20 atmósferas de presión durante unos 20 o 25 segundos. 
  • Las principales características del espresso son su sabor intenso, el cual tiene notas cítricas y achocolatadas. Acompañadas además de una textura cremosa. 
  • El espresso es más espeso que el café preparado por otros métodos.
  • El 24 de noviembre se conmemora el día mundial del Café Espresso.
  • La migración de comunidades italianas a grandes países del mundo como Estados Unidos o Australia en la década de 1970 fue una de los puntos clave que permitió el éxito de la cultura cafetera italiana a nivel mundial.
  • Bajo el régimen fascista, el café espresso que se consumía de pie estaba sujeto a controles de precios.
  • El aumento del consumo de espresso se asoció con la industrialización y la urbanización, especialmente en ciudades como Turín, Génova y Milán.
  • La cultura del espresso fue difundida por los italianos en sus colonias de África oriental, La Somalia Italiana y la Eritrea Italiana.
  • En la ciudad de Nápoles es costumbre dejar pago un café espresso en la barra del bar para que otra persona que no tiene la capacidad de pagarlo, pueda disfrutarlo sin ningún problema.
  • El consumo de espresso se ha convertido en el segundo producto más vendido en más tiendas especializadas de café.
  • El espresso es una de las bebidas que más se consume en Italia y en el mundo. 
  • La industria del espresso italiano puede generar alrededor de 1 billones de euros anualmente.
  • El precio del café espresso en Italia es de 2,22 dólares mientras que en otros países como Estados Unidos es de 3,2 dólares.

Cultura del Café en Italia

Los italianos siguen asistiendo a su café local durante su rutina diaria. La cultura del café creada en los años 40 sigue muy vigente todavía, a pesar de los niveles de globalización. 

Es evidente que el espresso se ha convertido casi en un estilo de vida para los habitantes de Italia

Muchos consideran que esto sucede gracias a que el espresso tiene la capacidad de hacer que muchos italianos pueden evocar buenos y lejanos recuerdos, cuando lo consumen al empezar el día para recargar energías o simplemente cuando desean hacer una pausa y relajarse.

Sin duda alguna esta bebida se ha convertido en un elemento de identidad en el país italiano e incluso en uno de sus principales atractivos.

¿Qué relación tiene la cultura del Café italiano con la cultura cafetera a nivel mundial?

La cultura cafetera mundial se ha visto muy influenciada por los cafés italianos a lo largo de los años.   

A tal punto que los italianos han querido controlar la propiedad Intelectual del espresso.

De hecho, el parlamento italiano ha enviado inspectores alrededor del mundo para certificar si el café espresso producido en varios lugares coincide con los estándares de calidad italianos.

Esto demuestra que los italianos se sienten muy orgullosos de su café espresso ya que representa una parte muy importante dentro de su cultura. 

Aun así, el café es una bebida mundial y por lo tanto Italia no tiene la suficiente hegemonía cultural sobre el café para ejercer un control de tal magnitud.

Conclusión

Podemos decir que el espresso, se ha convertido en una tradición que pasará de generación en generación, para acompañar en todo momento a los italianos y de igual forma a todos aquellos que disfrutan de su sabor.

De manera que es una gran oportunidad para que puedas repasar cómo preparar un buen café espresso.

Dicho esto, esperamos que hayas disfrutado al máximo la historia de uno de los cafés más degustados a lo largo y ancho del mundo.

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